Los aspectos sociales también se relacionan con un buen estado de salud. Un estudio de la Universidad de California en Los Angeles (UCLA), concluye que casarse después de los 25 años puede ser beneficioso para la salud de los huesos masculinos.
El estudio se basa en el análisis de datos de 294 hombres y 338 mujeres en Estados Unidos. Los investigadores encontraron evidencia de que los hombres que se casaron cuando eran menores de 25 años tenían una fortaleza ósea menor a la de los que se casaron por primera vez a una edad más tardía.
Además, vieron que los hombres en matrimonios estables tenían mayor resistencia ósea que los que se habían divorciado o separado anteriormente y mayor también de los que tenían una relación inestable.
Aunque no se vio relación entre la salud ósea y el estado civil de las mujeres, vieron que las mujeres con parejas que las apoyaban tenían una mayor fortaleza en los huesos que aquellas cuya pareja no las apreciaba de esa forma.
“La buena salud no sólo depende de los buenos hábitos de vida, como mantener una dieta saludable y no fumar, sino también de otros aspectos sociales, como la calidad de las relaciones de pareja”, asegura la investigadora Carolyn Crandall, en el sitio de la UCLA.
El estudio se basa en el análisis de datos de 294 hombres y 338 mujeres en Estados Unidos. Los investigadores encontraron evidencia de que los hombres que se casaron cuando eran menores de 25 años tenían una fortaleza ósea menor a la de los que se casaron por primera vez a una edad más tardía.
Además, vieron que los hombres en matrimonios estables tenían mayor resistencia ósea que los que se habían divorciado o separado anteriormente y mayor también de los que tenían una relación inestable.
“La buena salud no sólo depende de los buenos hábitos de vida, como mantener una dieta saludable y no fumar, sino también de otros aspectos sociales, como la calidad de las relaciones de pareja”, asegura la investigadora Carolyn Crandall, en el sitio de la UCLA.