Un estudio de investigadores de la Universidad del Sur de California (USC) ofrece una comprensión de la relación entre el “sexting” y el comportamiento sexual en la adolescencia temprana.
La investigación, publicada en la revista científica Pediatrics, encontró que los adolescentes de entre 12 y 14 años que reciben mensajes sexuales son seis veces más propensos a ser sexualmente activos.
Aunque existen investigaciones previas que han examinado el fenómeno del sexting y el comportamiento sexual de jóvenes que estudian bachillerato o universidad; en esta ocasión, los científicos estaban interesados particularmente en la adolescencia temprana o pubertad, debido a que datos pasados demostraron una relación clara entre la iniciación sexual temprana y el comportamiento sexual de riesgo (como el embarazo adolescente, el sexo bajo la influencia de las drogas o alcohol, la experiencia de las relaciones sexuales forzadas y un mayor riesgo de enfermedad de transmisión sexual).
El análisis utilizó una muestra de 1,300 estudiantes de secundaria anónimos de la encuesta realizada por el Centro de Control de Enfermedades y Prevención de Comportamiento de Riesgo en Jóvenes.
Los encuestados tenían edades comprendidas entre los 10 y 15, con una edad media de 12.3 años. Los investigadores encontraron que aún con un control de mensajes sexuales explícitos (sexts), aquellos adolescentes que envían más de 100 mensajes de texto diarios fueron más propensos a ser sexualmente activos.
Fuente: Quo
La investigación, publicada en la revista científica Pediatrics, encontró que los adolescentes de entre 12 y 14 años que reciben mensajes sexuales son seis veces más propensos a ser sexualmente activos.
Aunque existen investigaciones previas que han examinado el fenómeno del sexting y el comportamiento sexual de jóvenes que estudian bachillerato o universidad; en esta ocasión, los científicos estaban interesados particularmente en la adolescencia temprana o pubertad, debido a que datos pasados demostraron una relación clara entre la iniciación sexual temprana y el comportamiento sexual de riesgo (como el embarazo adolescente, el sexo bajo la influencia de las drogas o alcohol, la experiencia de las relaciones sexuales forzadas y un mayor riesgo de enfermedad de transmisión sexual).
El análisis utilizó una muestra de 1,300 estudiantes de secundaria anónimos de la encuesta realizada por el Centro de Control de Enfermedades y Prevención de Comportamiento de Riesgo en Jóvenes.
Fuente: Quo