Las sillitas de bebé son imprescindibles para viajar con niños, tanto por normativa legal como por seguridad de los más pequeños. Eso sí, son un absoluto incordio que ocupan un lugar precioso en el vehículo y evitan su fácil transporte de un coche a otro o incluso de cara a viajar en taxi. Gracias al nuevo prototipo de la marca sueca Volvo estos problemas podrían ser cosa del pasado. Un sistema inflable y ligero podría ser la solución.
El asiento para bebés dispone de un sistema que hincha la sillita en menos de 40 segundos (el mismo que emplea para desinflarlo) y su peso no llega a los 5 kilos, lo que le permite ser fácilmente transportable. Además, el invento dispone de conexión wireless para poder controlarlo a distancia cómodamente. Su tamaño plegado es de 45 x 50 x 20 centímetros, es decir, como un pequeño maletín.
Para conseguir la robustez necesaria en este tipo de dispositivos de seguridad infantil sus inventores han utilizado una tela especial y un sistema de costuras especialmente fuerte para aguantar la presión de hinchado.
A pesar de ser solo un prototipo parece que la idea puede dar lugar a un sistema de retención comercializable, pues las posibilidades de uso son infinitas. Desde su uso compartido en distintos coches de manera cómoda y sencilla hasta el transporte en otros medios, como el avión, el tren, taxis etcétera. Y yendo un paso más allá… ¿qué ocurriría si dicho dispositivo tuviera diversas opciones de inflado convirtiéndose en distintos tipos de sillita de bebé?
El asiento para bebés dispone de un sistema que hincha la sillita en menos de 40 segundos (el mismo que emplea para desinflarlo) y su peso no llega a los 5 kilos, lo que le permite ser fácilmente transportable. Además, el invento dispone de conexión wireless para poder controlarlo a distancia cómodamente. Su tamaño plegado es de 45 x 50 x 20 centímetros, es decir, como un pequeño maletín.
Para conseguir la robustez necesaria en este tipo de dispositivos de seguridad infantil sus inventores han utilizado una tela especial y un sistema de costuras especialmente fuerte para aguantar la presión de hinchado.
A pesar de ser solo un prototipo parece que la idea puede dar lugar a un sistema de retención comercializable, pues las posibilidades de uso son infinitas. Desde su uso compartido en distintos coches de manera cómoda y sencilla hasta el transporte en otros medios, como el avión, el tren, taxis etcétera. Y yendo un paso más allá… ¿qué ocurriría si dicho dispositivo tuviera diversas opciones de inflado convirtiéndose en distintos tipos de sillita de bebé?