Un joven australiano de 22 años despertó, luego de una semana, del coma en que lo dejó un accidente de tránsito. Sin embargo, la sorpresa fue doble, ya que, luego de decir unas cosas en su idioma, comenzó a escribir en mandarín.
Según los medios australianos, lo primero que dijo Ben McMahon fue: "Disculpe, me siento realmente adolorido". Luego, le solicitó a la enfermera un papel, en el que escribió en mandarín: "Amo a mi mamá, amo a mi papá. Me recuperaré".
Se sabe que Ben había estudiado mandarín en la escuela, pero no tenía el mejor nivel. Según refieren sus padres nunca había podido escribirlo o hablarlo con fluidez.
El joven ha aprovechado su nueva habilidad, se mudó a Shanghai a estudiar comercio, y antes trabajó como guía turístico y presentador de un programa de televisión en mandarín.
Un neurocientífico del Instituto del Cerebro de Queensland explicó que como consecuencia del accidente, al joven australiano se le habrían activado las partes del cerebro que retuvieron lo que aprendió de mandarín, pero dañaron las que recuerdan el inglés.
