Un estudio ha descubierto la fórmula secreta para convertirse en un maestro del amor, manteniendo un matrimonio feliz y prolongado.
Hoy en día es común que las parejas recién casadas terminen divorciadas a los pocos años de iniciar el compromiso. Los matrimonios prolongados son cada día más escasos, y de estos solo tres de cada diez logran ser matrimonios felices, según informa la revista 'The Atlantic' .
Lo anterior ha provocado que distintos psicólogos busquen entender el fenómeno para ofrecer una fórmula científica que permita a las personas tener relaciones amorosas prolongadas y saludables. Uno de ellos es John Gottman, director del Instituto Gottman en Nueva York, el cual lleva reuniendo información desde 1986, cuando inició el proyecto denominado 'El laboratorio del amor'.
Su estudio consistió en conectar a las parejas a un aparato de electrodos al mismo tiempo que se les hacía hablar sobre su relación, los principales problemas que enfrentan, sus recuerdos agradables, entre otros.
Así, con los resultados obtenidos, Gottman y su equipo de investigación dividieron a las parejas en dos grupos: unos fueron catalogados como 'maestros', mientras a los otros los denominaron 'desastres'. Los primeros fueron aquellos matrimonios que después de seis años se mantenían felices, mientras los 'desastres' se habían divorciado o vivían insatisfechos con la relación.
Según Gottman, la clave para que las personas puedan ser 'maestras' en el amor radica en el tipo de interacción que hay con la pareja. En un matrimonio prolongado y feliz las personas respondieron con amabilidad en un 90% a las necesidades emocionales de su pareja. Aquellos que fueron más críticos y agresivos, poniendo atención y énfasis en los errores y defectos, terminaron separados.
Hoy en día es común que las parejas recién casadas terminen divorciadas a los pocos años de iniciar el compromiso. Los matrimonios prolongados son cada día más escasos, y de estos solo tres de cada diez logran ser matrimonios felices, según informa la revista 'The Atlantic' .
Lo anterior ha provocado que distintos psicólogos busquen entender el fenómeno para ofrecer una fórmula científica que permita a las personas tener relaciones amorosas prolongadas y saludables. Uno de ellos es John Gottman, director del Instituto Gottman en Nueva York, el cual lleva reuniendo información desde 1986, cuando inició el proyecto denominado 'El laboratorio del amor'.
Su estudio consistió en conectar a las parejas a un aparato de electrodos al mismo tiempo que se les hacía hablar sobre su relación, los principales problemas que enfrentan, sus recuerdos agradables, entre otros.
Así, con los resultados obtenidos, Gottman y su equipo de investigación dividieron a las parejas en dos grupos: unos fueron catalogados como 'maestros', mientras a los otros los denominaron 'desastres'. Los primeros fueron aquellos matrimonios que después de seis años se mantenían felices, mientras los 'desastres' se habían divorciado o vivían insatisfechos con la relación.
Según Gottman, la clave para que las personas puedan ser 'maestras' en el amor radica en el tipo de interacción que hay con la pareja. En un matrimonio prolongado y feliz las personas respondieron con amabilidad en un 90% a las necesidades emocionales de su pareja. Aquellos que fueron más críticos y agresivos, poniendo atención y énfasis en los errores y defectos, terminaron separados.
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